Wigberto Puin … (no verificado)

Septiembre 04, 2021

Sin duda, la brecha digital entre los centros urbanos y las regiones más apartadas en los países de A.L. cada vez es mayor, haciéndose absolutamente evidente en una economía como la colombiana en la qué tal escenario muestra condiciones verdaderamente desoladoras, como ha quedado aún más demostrado con la irrupción de la pandemia que hoy atravesamos. En colombia, la situación de extrema pauperización de la educación en las zonas más vulnerables, que siguen siendo castigadas por la violencia y la poca o nula presencia del estado, está matizada por los altísimos niveles de corrupción en todos los niveles institucionales. Un ejemplo de ello, entre los muchos que se ven todos los días, es la más recienta adjudicación que el ministerio de las comunicaciones hizo, de forma claramente amañada, a grupos de interés corruptos apoyados por elites políticas aliadas del gobierno, cuyo supuesto fin era alcanzar el máximo de cobertura de Internet en la regiones aisladas y que terminó siendo un total fiasco, con la pérdida de alrededor de diecinueve millones de dólares otorgados como anticipo sin que se hubiera adelantado avance que mostrar. Esta evidencia de corrupción ha terminado por profundizar la violacion al derecho de la educación de muchos de los niños y jóvenes más pobres del país.