La agricultura, la minería y el turismo, los impulsores del crecimiento sostenible de Ecuador

Disponible en:
La agricultura, la minería y el turismo, los impulsores del crecimiento sostenible de Ecuador En Ecuador existen grandes oportunidades para dar un salto cualitativo y cuantitativo para alcanzar el estatus de país de ingresos altos. Tres son los sectores claves: agricultura, minería y turismo.

 

En la última década, la economía ecuatoriana se ha mantenido prácticamente estancada, entre 2014 y 2022 su crecimiento promedio fue del 0,2%. Ecuador ha sido severamente impactado por la pandemia, ha pasado por transiciones políticas inesperadas y un desorbitado e inédito incremento de la inseguridad.

¿Ecuador puede crecer más? 

Por supuesto que sí. En Ecuador existen grandes oportunidades para dar un salto cualitativo y cuantitativo para alcanzar el estatus de país de ingresos altos. Tres son los sectores claves: agricultura, minería y turismo.

Analicemos algunas de estas oportunidades  en este blog con base en el nuevo informe del Banco Mundial titulado “Ecuador: Crecimiento resiliente para un futuro mejor”, donde se exploran algunas alternativas que se pueden poner en práctica con una activa participación conjunta del Estado y el sector privado.

Con la mira en tres sectores

Ecuador ha dependido de los ingresos del petróleo durante décadas y la fluctuación de precios del crudo han condicionado al país a vivir en un constante vaivén entre la bonanza y la austeridad.  Por eso es vital la diversificación y Ecuador cuenta con tres potenciales sectores que además de dinamizar la economía pueden convertirse en fuentes de generación de ingresos sostenibles a largo plazo.

Actualmente 1 de cada 3 ecuatorianos encuentra empleo en la agricultura y el sector es el responsable del 42% de las exportaciones del país. Ecuador cuenta con suelos fértiles, condiciones climáticas favorables y una importante diversidad de productos como el cacao, la pitahaya, el brócoli, entre otros cuya calidad abre las puertas de mercados internacionales.

Pero es necesario fomentar cultivos con valor agregado; como el aceite de aguacate que se está produciendo en Ecuador, o la amplia variedad de chocolates cuyo insumo es el cacao fino de aroma que se cosecha en muchas regiones del país; y que los productores adquieran conocimientos de técnicas de riego eficiente y cultivo tecnificado.  Ese paso permitirá liberar el potencial agrícola y aplicar prácticas sostenibles con el medio ambiente.

Otro sector que tiene amplio potencial para generar grandes ingresos es el de la minería formal. Ecuador cuenta con US$220 mil millones en reservas minerales colocándolo como el segundo destino más atractivo para la inversión minera en la región, según el Índice de Atractivo de Inversiones del Instituto Fraser.

Además, en los últimos años, las exportaciones del sector se han multiplicado en más de 7 veces, pasando de US$282 millones en 2018 a US$2200 millones en 2022.

Algo similar sucede con el empleo. En 2021 la minería formal generó 37 mil empleos directos.  Se proyecta que para 2025 la industria contrate a más de 273 mil personas y otras 80 mil tengan empleos indirectos. 

Implementar una minería regulada implica poner en marcha una explotación controlada del recurso minero. El otro desafío es que se mantiene como un tema sensible dentro de la sociedad y eso sucede debido a que faltan planes eficientes de comunicación que permitan conocer las ventajas y posibilidades de desarrollo que pueden generarse a partir de la actividad minera formal.

El informe plantea algunas alternativas que podrían ayudar a fortalecer este sector como: 

  • Capacitación a los gobiernos locales para la implementación de proyectos de desarrollo con los ingresos mineros;
  • Implementación de tecnologías que minimicen la huella ambiental;
  • Promoción de leyes que garanticen la consulta previa a los pueblos y nacionalidades indígenas con el fin de contar con una industria responsable y sostenible.

Por último, pero no menos importante, está el turismo.  Ecuador es un destino único con una inagotable oferta de atractivos.  Cuenta con un inmenso y diverso patrimonio natural además de una riqueza cultural e histórica.

Sin embargo, Ecuador no ha podido capitalizar el potencial que el turismo puede aportar a la economía.  Esta actividad representa solo el 2,9 por ciento del PIB y el 4,8 por ciento del empleo, entre los más bajos de la región; mientras en Perú o Costa Rica ha superado el 5% la contribución al PIB y en México el 13%.

Si se desarrolla una marca país que coloque al Ecuador como un destino único en el mundo, se podría atraer a turistas de países de ingresos altos, que antes de la pandemia representaban un 57% y que en promedio gastaron cerca de 1500 dólares por persona en sus visitas.

El turismo es una fuente de desarrollo que promueve la creación de infraestructura pública y privada además de activar a varios sectores dentro de la sociedad. 

Mejorar las condiciones

Para potenciar el crecimiento es necesario generar acciones que mejoren la competitividad.  Y es ahí donde el Estado cumple un rol clave.

Por ejemplo, es fundamental mantener una responsabilidad fiscal que busque un equilibrio sostenible entre el gasto y la generación de ingresos.  Es clave empoderar al sector privado, pero se le debe apoyar eliminando barreras que sofocan la competitividad.

Algunas condiciones podrían incluir revisar las rígidas regulaciones laborales, fomentar la competencia apoyando a pequeñas y medianas empresas.  Invertir en el capital humano con reformas educativas que produzca una fuerza laboral más capacitada y productiva.

Se requieren reformas, pero sobre todo enfrentar el futuro estratégicamente.  Ecuador tiene el potencial y las condiciones. 

¿Qué más hace falta para empezar a dar el gran salto?


Christian Yves González Amador

Economista Sénior de País para Ecuador

Únase a la conversación

Este contenido no se mostrará públicamente
Caracteres restantes: 1000