¿Qué sucedería si saliéramos a la calle y les preguntáramos a los salvadoreños cuáles creen que son las prioridades de su país? ¡En el Banco Mundial hicimos la prueba! Nos fuimos al Parque Central y a algunas de las universidades de San Salvador, así como a otros municipios fuera de la capital y hablamos con la gente.
No lo hicimos de forma tradicional, con encuestas o entrevistas, sino con dos herramientas algo nuevas para el Banco Mundial: una pizarra y un marcador. Escribimos la frase “El Salvador Necesita…” y nos fuimos a buscar quien quisiera completarla.
También fuimos a las escuelas a hablar con una audiencia nueva para nosotros: los niños. Les pedimos que dibujaran cómo querían que fuera El Salvador en el futuro. Las respuestas revelan un mundo de esperanzas en un contexto no siempre fácil.
Este material lo exhibimos en el Museo de Arte de El Salvador (MARTE). La exposición, que duró un mes, reflejaba algunos de los ámbitos de preocupación de los ciudadanos.
Después abrimos la discusión al espacio online, con la etiqueta #SVnecesita. Recibimos respuestas de sectores bien distintos, con lo cual lográbamos uno de los objetivos de este “experimento” de comunicación.
Las leímos, analizamos y ordenamos por temáticas. Esto nos permitió identificar que en la escala de prioridades figura el tema de la seguridad. Erradicar la delincuencia, paz, leyes más duras, eliminar las pandillas fueron algunos de los mensajes que recibimos.
Otros hacían referencia a tiempos en que la situación era distinta. “El Salvador necesita seguridad, mis padres tenían sueldos promedio, hubo que sortear dificultades y tiempos económicos difíciles, pero nunca sintieron la necesidad de salir al país con tal de huir de tanta violencia”, señalaba uno de los usuarios a través de redes sociales.
La prevención de violencia no era un tema inesperado en las consultas. Sabíamos y seguimos pensando que es uno de los aspectos que más afectan el desarrollo del país a nivel humano, y también social y económico.
Por ello decidimos apoyar hace algún tiempo la creación de la Orquesta Sinfónica Juvenil Don Bosco, una iniciativa innovadora de la Fundación Edytra que permitió que centenares de niños que viven en barrios afectados por violencia encontraran en la música una esperanza a su día a día.
Otra de las grandes prioridades que identificamos fue la mejora del sistema educativo. “El Salvador necesita urgentemente subir la calidad de la educación”. El país necesita “educación de alto nivel”. “Una mejor educación dará mejores hijos, padres, trabajadores, profesionales, empresarios, contribuyentes, políticos”. “El Salvador necesita educación de calidad parvularia hasta secundaria”, fueron algunas de las respuestas recibidas.
Educación como una inversión de futuro es lo que nos motivó a apoyar en 2012 las Escuelas de Tiempo Pleno a través de un proyecto de 60 millones para mejorar la calidad de la educación. El objetivo era mejorar las tasas de acceso, retención y graduación de los alumnos de los ciclos inferior y superior de educación secundaria de las escuelas públicas.
La tercera prioridad identificada fue el combate a la corrupción. Los ciudadanos expresaron su preocupación por que exista una buena administración de los fondos públicos, que los funcionarios trabajen con verdadera vocación de servicio, que los políticos sean honrados y que desaparezca la corrupción.
Otras de las prioridades identificadas fueron:
- Empleo
- Aumentar el salario mínimo
- Apoyo para los emprendedores
- Políticos comprometidos
- Oportunidades para los jóvenes
- Igualdad de oportunidades
Este proceso de consultas normalmente lo hacemos en reuniones con el Gobierno, el sector privado, asociaciones de jóvenes, think tanks, universidades, etc. Pero esta vez quisimos abrirnos al público en general, invitándoles a expresar su opinión a través de diferentes medios. Porque sus preocupaciones son también las nuestras. De esta forma, en el Banco Mundial ratificamos nuestro compromiso de atender esas preocupaciones y de darle un mejor desarrollo a El Salvador.
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