La defecación al aire libre es la práctica de las personas de defecar en lugares abiertos, como en las alcantarillas de las calles, detrás de arbustos o en masas de agua. Entre 2000 y 2017, la cantidad de personas en todo el mundo que realizaban esta práctica se redujo casi a la mitad, de 1300 millones a unos 670 millones (9 % de la población mundial). En India, la cantidad de personas que defecan al aire libre disminuyó un 55 % entre 2000 y 2017, de 767 millones a 344 millones, pero hasta entonces todavía era el país con más casos, seguido de Nigeria e Indonesia.
La defecación al aire libre contamina las fuentes de agua potable y propaga enfermedades como el cólera, la diarrea y la disentería. Según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud,
La diarrea frecuente incrementa el riesgo de malnutrición en los niños. La defecación al aire libre también atenta contra la dignidad y la seguridad humanas. Las mujeres y niñas que realizan esta práctica pueden llegar a ser víctimas de violencia sexual.