Quedan solamente cerca de 250 tigres en estado salvaje en Tailandia y alrededor de 3.200 a nivel mundial.
Ninguno apareció cuando cubrí la capacitación regional en el sistema de Patrullas Inteligentes de la Iniciativa Mundial para la Conservación del Tigre en el Santuario de Vida Silvestre de Huai Kha Khaeng, pero aprendí más sobre tigres entonces que lo que lo hice jamás en un zoológico.
Pasé una tarde en una atalaya que estaba sobre un arroyo, esperando tener un vistazo de los animales que pudieran detenerse a beber agua.
Era la época del apareamiento de los pavos reales, y un pavo real verde fue el primero que se asomó, sacudiendo ilusionadamente sus magníficas plumas hacia cuatro pavos reales.
Siguieron horas de tranquila espera, de mirar fijamente la densa espesura de árboles y las montañas más allá. Huai Kha Khaeng es un patrimonio natural de la humanidad de la UNESCO y el hogar de hasta 33% de todas las especies de mamíferos en Asia sudoriental..
El sol se había empezado a poner cuando una manada de bantengs -que parecían búfalos de agua anaranjados- emergió del monte para beber del arroyo.Los números de bantengs están disminuyendo porque los seres humanos también los cazan para usarlos como alimento.Anak Pattanavibool, director de la Sociedad de la Conservación de la Vida Silvestre de Tailandia, dijo que éramos muy afortunados por haberlos visto..
También aparecieron un sambar (un ciervo grande de Asia) y un jabalí. Me dijeron que el banteng, el sambar y el jabalí son cruciales para la conservación del tigre porque son su presa natural..
Desgraciadamente, estas especies también son blancos principales de la caza furtiva en Tailandia. Y sin su alimento, los tigres tienen menos posibilidades de supervivencia..
Repentinamente, las copas de los árboles se sacudieron y se produjo un fuerte crujido. Un elefante asiático -era un macho adolescente- surgió pesadamente de un matorral de bambúes y comenzó a cepillarse el polvo sobre sí mismo con su trompa..
Cuando ves un animal en una jaula o realizando trucos en un show siempre da una sensación de tristeza o incluso de culpabilidad. Esta era la primera vez que veía a un elefante en su ambiente salvaje y me maravilló todo que lo hizo, sabiendo que no era un truco aprendido para entretener a los seres humanos.
El ecosistema de Huai Kha Khaeng está prosperando: el bosque es grande y hay un montón de potencial aquí para que la vida silvestre florezca. No vi ningún tigre, pero allá es fácil creer que crecen bien..
Mi colega tomó excelentes fotos de los bantengs, el sambar, el elefante y de los guardabosques tailandeses que protegen el Santuario de Vida Silvestre de Huai Kha Khaeng. Por favor, mire también las imágenes (i).
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