La mutilación/ablación genital femenina es una realidad cotidiana para millones de niñas y mujeres en todo el mundo. Ya no me sorprende cuando una mujer me confía que ha sido “cortada”, o me cuenta sobre las consecuencias con las que tiene que vivir. Hace poco, tuve el privilegio de reunirme con sobrevivientes de esta práctica que son también activistas, y están luchando para eliminarla en el curso de una generación. Esto me recordó que una persona puede marcar la diferencia en la eliminación de la mutilación/ablación genital femenina.
Con ocasión del Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina, el 6 de febrero, apoyamos el movimiento #EndFGM (Fin a la mutilación genital femenina), encabezado por una sobreviviente, y que cobra ímpetu y fuerza en todo el mundo.
La mutilación/ablación genital femenina, conocida como “corte”, es una forma de violencia que afecta al menos 200 millones de niñas y mujeres por todo el mundo. Alrededor de 6000 mujeres y niñas son víctimas de mutilación genital a diario , padeciendo consecuencias prolongadas e irreversibles durante toda su vida.
La práctica se relaciona estrechamente con el fin de la pobreza extrema ; las niñas que la sufren tienen mayores probabilidades de ser obligadas a casarse a temprana edad y de ser pobres y permanecer pobres, y menos probabilidades de tener acceso a educación. Más allá de los datos y las estadísticas, investigadores han indicado que la mutilación genital femenina priva a las mujeres de tener una buena salud sexual y psicológica.
Esto es lo que Jaha Dukureh, una sobreviviente y activista, denominó “pobreza planificada para las niñas”, y un instrumento para su consolidación. Dukureh, al igual que otras sobrevivientes y activistas, habló durante un reciente evento en el Grupo Banco Mundial titulado “Poner fin a la mutilación genital femenina: El rol de las leyes, la educación y las normas sociales”.
Durante el encuentro, Dukureh, quien fue “cortada” cuando tenía un mes de vida, dijo que comenzó a entender las repercusiones de este trauma a los 15 años, edad en que contrajo matrimonio. Sobrevivientes como ellas están a la vanguardia de este creciente movimiento internacional para poner fin a la práctica.
Esta lucha la encabezan activistas y ONG. Tostan, una organización sin fines de lucro que trabaja en las zonas rurales de Senegal, realiza esfuerzos para acelerar el movimiento en favor del fin de la mutilación/ablación genital femenina. Tostan emplea una estrategia integrada y holística de educación no formal para empoderar a las comunidades, capacitándolas en temas como visión y valores, democracia, derechos humanos y responsabilidades, resolución de problemas, higiene y salud. La estrategia de largo plazo de Tostan brinda oportunidades a los miembros de la comunidad de considerar aspiraciones y normas alternativas.
Creemos que la legislación y el conocimiento de las mujeres y niñas de sus derechos consagrados en la ley son los primeros pasos en la lucha para #EndFGM.
Con este fin, la Vicepresidencia Legal del Grupo Banco Mundial ha dado a conocer un nuevo documento en que se proporciona un panorama general de instrumentos internacionales y regionales claves que abordan la mutilación/ablación genital femenina , así como de leyes nacionales adoptadas para prohibir la práctica. La publicación Compendium of International and National Legal Frameworks on Female Genital Mutilation/Cutting (Compendio de marcos legales internacionales y nacionales sobre la mutilación/ablación genital femenina) (PDF, en inglés) es un documento de trabajo preparado para contribuir a este debate de desarrollo urgente, dando por entendido que la ley es una importante herramienta de empoderamiento para poner fin a dicha práctica.
Esperamos que responda a las necesidades de los interesados en esta materia, así como de aquellos que trabajan con mujeres y niñas afectadas o en riesgo. Su finalidad es ser una herramienta de referencia para especialistas en desarrollo, abogados, líderes comunitarios, sobrevivientes, académicos, investigadores y estudiantes, además de personas interesadas en ayudar a poner fin a esta práctica.
En 2012, la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó una resolución pidiendo a la comunidad internacional intensificar los esfuerzos mundiales para la eliminación de la mutilación genital femenina. También exhortó a los “Estados, el sistema de las Naciones Unidas, la sociedad civil y todos los interesados a seguir celebrando el Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina el 6 de febrero y a aprovechar ese día para intensificar las campañas de concienciación y adoptar medidas concretas contra la mutilación genital femenina”.
El presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, se pronunció (i) contra la mutilación genital femenina en 2014, señalando que “como médico, reconozco el sufrimiento terrible. Como antropólogo, veo que está arraigado a lo largo del tiempo, pero realmente se puede cambiar”.
Deseamos que ese cambio se produzca. Podemos ser la generación que pone fin a la mutilación genital femenina para siempre.
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