¿Dónde funcionan las políticas EdTech? Aprovechar los datos para mejorar las políticas de Educación y Tecnología (EdTech)

 

 

EDTech Readiness Index

El Banco Mundial, con el apoyo de Imaginable Futures y como parte del Tablero Global de Políticas Educativas (por sus siglas en inglés GEPD), ha creado el Índice de Preparación EdTech, (ETRI). Esta herramienta de medición EdTech (de tecnología al servicio de la educación) permitirá a los países (a) identificar las buenas prácticas y las áreas en las que las políticas de EdTech pueden mejorar, y (b) supervisar el progreso de los países en este tema. Habiendo ya completado el trabajo técnico inicial, el Índice se encuentra ahora en su fase de implementación, y el equipo está en proceso de identificar los países en los que el ETRI podría ser piloteado en 2022.

El por qué: contexto y necesidad

La pandemia de COVID-19 ha interrumpido la escolarización de más de 1.600 millones de estudiantes en todo el mundo. Mientras las escuelas cerraban para proteger a estudiantes, profesores y sus comunidades, la mayoría de los países invirtieron mucho en establecer diferentes modalidades para impartir educación a distancia. Pero, tal como sabemos ahora, los nuevos datos indican una "reducción absoluta de los niveles de aprendizaje", destacando que la eficacia de estas estrategias ha sido limitada y que los grupos vulnerables tienden a verse desproporcionadamente afectados. Muchos sistemas educativos no lograron su objetivo de garantizar la continuidad del aprendizaje debido a la brecha digital impidiéndoles acceder a un aprendizaje a distancia. Sólo el 25% de los países de bajos ingresos que participaron en un estudio mundial indicaron que tenían un plan para ofrecer un acceso equitativo al aprendizaje a distancia para las comunidades más marginadas.

A medida que los países siguen invirtiendo en tecnologías educativas para alcanzar el potencial de la tecnología en el apoyo al aprendizaje, ¿Cómo garantizamos que estas inversiones aumenten las oportunidades de aprendizaje y reduzcan las desigualdades? ¿Cómo identificamos los aspectos fuertes y débiles de las estrategias de EdTech para garantizar entornos de aprendizaje adecuados donde los niños puedan aprender en cualquier momento y lugar?

¿Cómo desarrollar políticas EdTech eficaces e inclusivas?

Hemos desarrollado una herramienta que podría ayudar. La adopción global de soluciones EdTech se aceleró en respuesta a la pandemia. A medida que los países y los socios internacionales se orientan a catalizar EdTech para apoyar a la educación, hay una clara necesidad de consolidar herramientas globales para informar las decisiones políticas, de inversión y supervisar el progreso (o la falta de él). Es necesario desarrollar medidas estandarizadas para permitir la evaluación comparativa y establecer objetivos comparables a nivel mundial; esta es la motivación detrás del Índice de Preparación EdTech (ETRI).

El qué: un índice que sirva de base para las políticas de tecnología educativa

La idea del ETRI no es nueva: en anteriores entradas del blog (aquí y aquí) hemos propuesto,  promovido e imaginado la idea de cómo podría ser. Gracias a una asociación con Imaginable Futures, y como parte del más amplio Tablero Global de Políticas Educativas, esta idea ha cobrado vida.

El ETRI va más allá de la medición de la disponibilidad de dispositivos y el nivel de conectividad. Capta elementos más amplios del ecosistema educativo-tecnológico de un país a fin de aumentar las oportunidades de aprendizaje y reducir las desigualdades. Como muestra la figura siguiente, el Índice se organiza en torno a 6 pilares: Gestión escolar, Profesores, Estudiantes, Dispositivos, Conectividad y Recursos digitales. Los tres primeros pilares son los actores del sistema educativo, y los tres últimos son los insumos y la infraestructura que los actores necesitan para utilizar EdTech. Para cada pilar, el ETRI informa sobre un indicador de práctica (para captar las prácticas a nivel escolar), un indicador de política de jure (para captar si existe una política que informe sobre cada práctica) y un indicador de política de facto (para medir el grado de aplicación de la política). Estos tres tipos de indicadores permiten vincular las prácticas a nivel escolar con las políticas responsables de las mismas, identificando si las políticas existen y se aplican. Creemos que esta información puede ser muy útil para los responsables políticos a la hora de catalizar el poder de los planes de EdTech, a fin de promover y mantener los avances en el aprendizaje.

Tabla de índice de preparación de EDTech

El cómo: Recogida de datos a distancia para responder a las necesidades actuales

ETRI recoge datos a través de una Encuesta Escolar y una Encuesta Política. La Encuesta sobre Políticas sigue la metodología del Enfoque de Sistemas para Mejores Resultados Educativos (SABER, por sus siglas en ingles), en la que un experto local realiza una revisión legislativa para evaluar la exhaustividad de los marcos políticos, algo que puede hacerse a distancia y de forma independiente. La Encuesta Escolar recoge datos primarios mediante entrevistas en la escuela. Dados los riesgos sanitarios de la recogida en persona durante la pandemia de COVID-19, ETRI seguirá un enfoque flexible para la recolección de datos. A corto plazo, los encuestadores recogerán los datos a distancia mediante entrevistas telefónicas con los directores de las escuelas. A medio plazo, cuando sea seguro ir a las escuelas en persona, los encuestadores visitarán una muestra de escuelas para entrevistar a profesores, directores y alumnos, algo que puede hacerse juntamente con el trabajo de campo del GEPD. Este enfoque requiere la participación de los agentes locales a lo largo de todo el proceso para facilitar la recogida de datos, pero también para garantizar que los datos se comprendan, se utilicen y se aprovechen de forma eficaz.

Si está interesado en pilotar el ETRI en su país o quiere saber más, puede ponerse en contacto con el equipo en ETRI@worldbank.org. Les invitamos a estar atentos para ver cómo avanza este trabajo.

Enlaces relacionados:


Autores

Emma Lambert-Porter

Consultant, Education Global Practice

Únase a la conversación

Este contenido no se mostrará públicamente
Caracteres restantes: 1000