Actualización 2019: ¿Cuánto tiempo permanecen en el exilio los refugiados? Para averiguarlo, desconfíe de los promedios

“El tiempo promedio que los refugiados permanecen en los campos es de 17 años”. Esta cruel estadística ha sido citada en numerosas oportunidades y ha influido en nuestra percepción de que las crisis de refugiados son acontecimientos interminables que se salen de control. Tiene además consecuencias significativas al momento de decidir el tipo de ayuda que se necesita, la combinación de apoyo humanitario y asistencia para el desarrollo, y las posibles respuestas ante la crisis.

Pero ¿este dato es cierto? No tanto.

De hecho, la estadística de los “17 años” fue extraída de un informe interno de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) elaborado en 2004, en el que se la presentaba matizada con numerosas reservas que se perdieron en el camino. La estadística no se refiere a los campos, puesto que la enorme mayoría de los refugiados no vive en tales sitios. Asimismo, se limita a permanencias de cinco años o más, por lo que es una duración promedio de las estadías más prolongadas, no de todas. Y lo que es más importante aún, se refiere a la duración de las situaciones en sí, no al tiempo que las personas han permanecido en el exilio.

Tomemos como ejemplo la situación de los exiliados somalíes en Kenya. Los refugiados comenzaron a llegar masivamente a ese país hacia 1993, hace unos 26 años. Hoy en día son 252 500. Pero ¿se puede decir que todas estas 252 500 personas han estado exiliadas durante 26 años?

En realidad, las situaciones de desplazamiento forzado son intrínsecamente dinámicas: la cantidad de personas varía de un año a otro según los acontecimientos políticos y militares que se produzcan en el país de origen  (gráfico 1). Efectivamente, gran parte de los refugiados actuales no llegaron antes de 2008, es decir, hace unos 10 años.

Con estos criterios y utilizando los datos publicados por ACNUR correspondientes a fines de 2018, volvimos a calcular la fecha más temprana de llegada de los diversos contingentes de refugiados en cada situación (véase la metodología que empleamos, desarrollada anteriormente para este documento de trabajo [i]). Luego combinamos todas las situaciones en una única “población mundial de refugiados” y calculamos los promedios globales y las duraciones medianas.

¿Cuáles fueron los resultados?

Al analizar la “población mundial de refugiados” (véase el gráfico 2), podemos distinguir varios episodios claros de desplazamiento:
 
Ahora agrupemos estas cifras según las oleadas más grandes (gráfico 3):

Se observa una gran cohorte de unos 8,5 millones de “refugiados recientes”, que llegaron en los últimos cuatro años. Esto incluye cerca de 2,9 millones de sirios, así como personas que huyeron de Sudán del Sur (1,7 millones), Myanmar (0,7 millones), Afganistán (0,4 millones), Burundi (0,3 millones), República Democrática del Congo (0,3 millones), Iraq (2 millones) y República Centroafricana (0,2 millones). 

Otro grupo numeroso, de unos 6,4 millones de personas, ha permanecido entre cinco y nueve años en el exilio. Aquí se incluyen refugiados de Siria (3,6 millones), Sudán del Sur (0,6 millones), el grueso de los actuales refugiados de Somalia (0,3 millones) y personas que escaparon de Sudán (0,3 millones), República Centroafricana (0,2 millones), Afganistán (0,2 millones) y República Democrática del Congo (0,2 millones). 

Cerca de 3,2 millones de personas han permanecido en el exilio entre 10 y 34 años. Esto incluye años en los cuales la cantidad de refugiados fue relativamente baja y dos episodios en los que dicho número se incrementó: hace unos 17 años, con la llegada de aproximadamente 0,3 millones de refugiados sudaneses, y hace cerca de 27 años, con la llegada de 0,5 millones de somalíes y 0,2 millones de eritreos.

Por otro lado, un importante grupo de refugiados ha permanecido en el exilio entre 35 y 40 años: estos 2,2 millones de personas incluyen principalmente afganos (1,9 millones), pero también 0,3 millones de vietnamitas que huyeron de su país a fines de la década de 1970 y comienzos de la de 1980. Por último, se observan unas pocas situaciones muy prolongadas, con permanencias de hasta 58 años, en las que participan principalmente refugiados del Sahara occidental.

Ahora podemos pasar a analizar las duraciones promedio. A fines de 2018, la mediana de la permanencia en el exilio se ubicaba en los cinco años , es decir que la mitad de los refugiados de todo el mundo ha pasado cinco años o menos en el exilio. La duración mediana ha fluctuado ampliamente desde el fin de la Guerra Fría, en 1991, entre los 4 y los 14 años. En cambio, la duración media se ubica en 10,3 años y ha permanecido relativamente estable desde fines de la década de 1990, entre los 10 y 15 años.

Pero esto permite extraer otra conclusión importante: las tendencias pueden ser contrarias a lo que indica la intuición. De hecho, la disminución de la duración promedio del exilio por lo general no supone una mejora, sino que es producto del empeoramiento de la situación global.  Los promedios de cantidad de años se incrementan cuando el número de refugiados nuevos es relativamente escaso, y disminuyen cuando se producen grandes oleadas, por ejemplo, en 1993-94 (con los conflictos de la Ex-Yugoslavia y de Rwanda), en 1997-99 (con los conflictos de la República Democrática del Congo y otras partes de África), después de 2003 (con los conflictos de Iraq, Somalia y Sudán) y desde 2013 (con los conflictos de la República Árabe Siria).

También examinamos la cantidad de personas que han pasado más de cinco años en el exilio. A fines de 2018, esta cifra se ubicaba en 11,9 millones. El número de refugiados de larga data se ha mantenido extremadamente estable desde 1991, entre los 5 y 7 millones durante la mayor parte del período, antes de incrementarse de manera abrupta en los últimos tres años. Para este grupo, la duración promedio del exilio aumenta a medida que transcurre el tiempo, principalmente debido a la situación irresuelta de los refugiados afganos, que empuja los promedios hacia arriba. Estos se ubican ahora por encima de los 20 años.

Este breve análisis de los datos de ACNUR muestra que se puede utilizar la información disponible sobre los refugiados para aclarar algunas áreas significativas del debate sobre políticas. Es importante verificar que este debate se base en las evidencias empíricas, que pueden contribuir a elaborar una perspectiva más matizada acerca de un tema complejo.