Publicado en Voces

La desigualdad, el tema destacado en la entrevista de Al Jazeera

 Simone D. McCourtie / World Bank

En una conversación sobre diversas materias, el presidente del Grupo del Banco Mundial, Jim Yong Kim,  y  el periodista de Al Jazeera, Ali Velshi, (i) volvieron una y otra vez al tema de la desigualdad, que es cada vez más importante a medida que se agrava en el mundo.
 

Velshi, conductor de un programa nocturno de noticias de negocios en Al Jazeera América, (i) preguntó: ¿está creciendo la clase media en todo el mundo? ¿Está en buenas condiciones? ¿La solución de la desigualdad requiere una redistribución de la riqueza? ¿Cómo el Grupo del Banco Mundial  puede avanzar en sus objetivos de poner fin a la pobreza extrema y promover la prosperidad compartida cuando hay tantos obstáculos?
 
Kim respondió que nadie en ningún país puede permitirse ignorar el aumento de la desigualdad. (i) “Hay muchos datos realmente buenos que sugieren que los niveles más altos de desigualdad son en realidad un lastre para el crecimiento económico. De modo que, incluso si lo único que importa es el crecimiento económico, realmente debemos centrarnos en la desigualdad”, dijo.
 
El Grupo del Banco Mundial está observando el crecimiento de los ingresos del 40 % más pobre de la población en los países en desarrollo. Muchos dirigentes políticos están comenzando a comprender que “incluso para su sobrevivencia política, no pueden pasar por alto ese 40 %”, señaló Kim.

Las inversiones en las personas, para cuestiones como la educación (i) y la salud, (i) son fundamentales, agregó. Los habitantes de los países en desarrollo son cada vez más conscientes de cómo viven los ricos, y quieren mejores servicios y condiciones de vida. “Ahora sabemos que, a menos que se invierta en la gente, no se logrará crecimiento económico en el mediano y largo plazo, y quizás incluso en el corto plazo”, afirmó Kim.

Por otra parte, la pobreza extrema es “una condición que no debemos tolerar más”, dijo. Sin embargo, el objetivo de acabar con ella para 2030 es un gran desafío y requerirá que cerca de 50 millones de personas al año –1 millón de personas cada semana durante 16 años– salgan de la pobreza extrema.
 
“Nuestra atención está en una prosperidad que pueda ser compartida por todos. Y estamos muy [...] concentrados en sacar de la pobreza extrema a cerca de 1000 millones de personas para que puedan tener esas cosas que todo el mundo parece querer”, señaló Kim.

Las situaciones de conflicto (i) son una “enorme fuerza propulsora” de la pobreza, dijo. Los déficits de infraestructura en el mundo en desarrollo también limitan el crecimiento económico. Unos 11 millones de personas en Bélgica tienen acceso a la misma cantidad de electricidad que 1000 millones de personas en África, ejemplificó. Para abordar esta cuestión, el Grupo del Banco Mundial planea buscar nuevos asociados y usar su financiamiento para “atraer” fondos de otras fuentes.
 
Velshi, que lucía la insignia “Poner fin a la pobreza” en la solapa, pidió a Kim que explicara cómo un eslogan tan simple podía ser eficaz.

Kim, que ha pedido desde que asumió el cargo a expertos y al público en general que aporten ideas para acabar con la pobreza, dijo que la creación de un movimiento social en torno a un objetivo puede ayudar a que este se logre. Sacar a las personas de la pobreza es una meta “clara e importante”, manifestó. El Grupo del Banco Mundial, por su parte, tiene previsto actuar con mayor celeridad, aprovechar las últimas innovaciones y “poner a nuestras mejores personas” a trabajar en soluciones transformadoras para ayudar a más de 1000 millones de personas a salir de la pobreza extrema, concluyó.

Vea la repetición  del evento o lea la transcripción. (i)


Autores

Donna Barne

Escritora del departamento de Comunicación Corporativa, Banco Mundial

Únase a la conversación

Este contenido no se mostrará públicamente
Caracteres restantes: 1000