La violencia de género causa la muerte de más mujeres de entre 19 y 44 años que las guerras, el cáncer o los accidentes automovilísticos en todo el mundo. En Asia meridional, (i) este problema afecta a muchas personas y persiste en muchas formas, como lo muestran las siguientes estadísticas:
• En Bangladesh, (i) cada semana más de 10 mujeres sufren un ataque con ácido.
• En India, (i) 22 son asesinadas diariamente en actos violentos relacionados con la dote.
• En Sri Lanka, (i) el 60% de las mujeres denuncia haber sufrido abuso físico.
• En Pakistán, más de 450 mujeres y niñas mueren cada año en los denominados “homicidios de honor”.
• Y en Nepal, (i) esclavizar a las niñas es una práctica muy extendida. Los padres venden a sus hijas –normalmente entre los 6 y 7 años– para que trabajen como sirvientas.
No podemos permitir que esto continúe.
La gravedad de la violencia contra las mujeres en Asia meridional atrajo la atención pública mundial en diciembre de 2012 a raíz de la brutal violación en grupo y subsiguiente muerte de una estudiante de 23 años en Nueva Delhi. El caso provocó un movimiento denominado “Un Billón de Pie”, con mítines y eventos en India y todo el mundo. A principios de 2012, el atentado en Pakistán a Malala Yousafzai, una adolescente que defiende la educación de las niñas, también generó protestas públicas a nivel mundial. Para mí, estos trágicos acontecimientos renovaron la voluntad y la urgencia de abordar esta crucial cuestión de derechos humanos y desarrollo en la región.
Aunque el tema de la violencia de género es relativamente nuevo para el Banco Mundial, el Informe sobre el desarrollo mundial 2012: Igualdad de género y desarrollo (i) arrojó luz sobre la prevalencia del problema y cómo afecta el papel de la mujer en el desarrollo. En Asia meridional, el Banco está lanzando un nuevo programa para mejorar la respuesta a la violencia contra las mujeres en la región, profundizar la comprensión de las causas subyacentes y probar enfoques dirigidos a la prevención. Sin embargo, se trata de un asunto complejo que requiere de la acción de la sociedad en todos los niveles.
En la primavera, pedimos a los jóvenes de la región que compartieran sus ideas a través del correo postal, mensajes de texto y correo electrónico sobre qué se necesita para poner fin a la violencia de género en sus países. Recibimos más de 1.200 respuestas, que incluyen ideas innovadoras y sorprendentes tanto de mujeres como hombres jóvenes. Posteriormente, se organizó un debate titulado “Romper el silencio”, en el que expertos expresaron e intercambiaron sus experiencias y conocimientos sobre enfoques prácticos y políticas para abordar la violencia de género.
Nos damos cuenta de que involucrar a los jóvenes y aprovechar su pasión y creatividad es fundamental para romper el ciclo de esta violencia. Los jóvenes tienen el mayor potencial para cambiar la sociedad y el futuro. Considerando esto, estamos organizando un hackatón (i) en Nepal el 16 de junio con el objeto de encontrar soluciones tecnológicas para enfrentar este problema. Los instamos a inscribirse en el evento a través de este enlace.
Además, el 17 y 18 de junio (i) el Banco Mundial y Oxfam Internacional convocarán a responsables de la formulación de políticas, profesionales, investigadores y líderes de opinión de toda Asia meridional para debatir la manera de superar la violencia contra las mujeres en la región. Entendemos que ningún actor tiene todas las herramientas para tratar este problema complejo, multifacético y de difícil solución. En vista de ello, la conferencia tiene como objetivo reunir a un grupo diverso de personas y organizaciones y, al hacerlo, intensificar nuestra respuesta a la violencia de género en Asia meridional. Síganos en Facebook y Twitter durante la próxima semana para estar al tanto de las actualizaciones y lo más destacado de la conferencia y el hackatón.
Entendemos que la dificultad, interconectividad, escala y gravedad de la violencia contra las mujeres en Asia meridional y en todo el mundo demandará esfuerzos en todos los niveles. Por ello lo invitamos a compartir sus comentarios, preguntas e ideas.
Juntos podemos superar la violencia de género.
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