Cómo mejorar el liderazgo escolar en 4 pasos

Los sistemas educativos públicos luchan por definir el papel y las responsabilidades de los líderes administrativos versus y fracasan a la hora de impulsar el apoyo continuo a los profesores y aumentar el aprendizaje de los alumnos. Incluso cuando los funcionarios públicos son conscientes de la importancia del liderazgo escolar, las experiencias exitosas de selección y apoyo a los líderes suelen encontrarse fuera del sistema educativo público. Entonces, ¿cómo pueden los sistemas públicos aprender a introducir prácticas que refuercen el liderazgo escolar?

Aunque los debates sobre la prestación de una educación de calidad tienden a centrarse en los profesores, una amplia y diversa literatura demuestra que los directores fuertes son la mejor herramienta para aumentar los resultados del aprendizaje después de los profesores (ver recursos al final). Utilizar a los directores para el aprendizaje requiere considerarlos no sólo gestores administrativos, sino líderes escolares que apoyan a los profesores para aumentar el aprendizaje de los alumnos.

Los cuatro pasos para ser un gran líder escolar

La “ Citizens Foundation ” (CF) es un entidad no gubernamental sin fines de lucro para niños en riesgo de desescolarización en Pakistán. Con 1.450 escuelas construidas al efecto y otras 380 públicas bajo su gestión, ha sido parte de una transformación del aprendizaje en Pakistán: el 95 por ciento de los alumnos de la Citizens Foundation aprueban los exámenes finales de los cursos 9º y 10º (en Pakistán aprueban entre el 60 y el 70 por ciento) en 2021.

La CF elige a los líderes mediante un proceso que ha dado buenos resultados a la hora de encontrar candidatos a director y apoyarlos en sus funciones. Este proceso, que se describe a continuación, podría reproducirse en otros entornos con pocos recursos.

Paso 1: Selección de candidatos con potencial

Para seleccionar a los mejores líderes escolares, los candidatos participan en una sesión del Centro de Evaluación de Directores que se organiza en torno al lugar en el que trabajaría el potencial candidato en caso de ser seleccionado para el puesto. El centro de evaluación consiste en una serie de pruebas, actividades analíticas y juegos que son observados y calificados por un panel de 4 miembros. El panel califica a los candidatos según una rúbrica que detalla los elementos de un liderazgo escolar sólido:

• Capacidad (habilidad intelectual): conocimiento de la materia, capacidad de observación, claridad de pensamiento, resolución de problemas
• Logros (experiencia): título posgrado, experiencia docente, habilidades de liderazgo, perseverancia
• Relaciones (resolución de conflictos): respeto por los demás, resolución de conflictos, capacidad de comunicación.
• Pasión: compatibilidad con la visión de la institución

Los candidatos deben alcanzar una puntuación mínima para ser contratados como directores.

Paso 2: Formación y asesoramiento de los líderes escolares

Una vez contratados, reciben una capacitación de cinco días sobre la misión, los valores, las funciones, las responsabilidades, los indicadores fundamentales de rendimiento, los escenarios reales y las mejores prácticas de los directores, impartida por directores experimentados. La capacitación también les plantea los retos administrativos cotidianos que implica aplicar lo que han aprendido.

Durante una semana en la que acompañan a un director experimentado, los nuevos directores aprenden a poner en práctica los componentes de su formación previa al servicio. El acompañamiento les permite observar los procesos en práctica, cómo se mantiene la cultura escolar, cómo se elaboran los calendarios y los exámenes, los retos del día a día, cómo orientar a los profesores y cómo involucrar a los padres.

Paso 3: Gestionar e incentivar a los líderes escolares

Todos los directores se someten a una evaluación anual en la que se les califica según un Índice de Calidad en función de su eficiencia como líderes escolares. El índice califica los parámetros por los que fueron seleccionados y agrega dos más para el liderazgo académico y administrativo.

Los evaluadores internos, certificados mediante un riguroso proceso de selección y formación, pasan un día con cada director y gerente de educación. Su objetivo es comprender cómo la directora se ha centrado y cumplido con sus prioridades clave para el curso académico, qué tipo de apoyo ha proporcionado a los profesores y qué papel ha desempeñado en el fortalecimiento de la cultura escolar. Los evaluadores realizan observaciones de las clases y luego comparan sus observaciones con las que realiza la directora en su apoyo regular a los profesores para garantizar la concordancia. También exploran los puntos de vista de un director sobre sus profesores y alumnos y triangulan la información con otros datos disponibles en la escuela para calibrar si el apoyo es adecuado. Los directores deben comprender claramente el rendimiento de su centro basándose en los datos que ella recopila y mantiene regularmente.

La puntuación final de cada director es cuantitativa y se entrega con comentarios y objetivos negociados para mejorar el año siguiente. El proceso reconoce que hay información que puede ser única para una escuela o un director y que puede no estar reflejada en las rúbricas.

La puntuación – junto con otros datos como el rendimiento académico – se utiliza para asignar a cada director una evaluación de rendimiento. También tienen en cuenta información cualitativa como si el director es nuevo y se ha hecho cargo de una escuela muy difícil o si ha habido una mejora significativa en el último año.

Los directores reciben una de cinco calificaciones: Sobresaliente, Por encima de las expectativas, Cumple las expectativas, Por debajo de las expectativas o Necesita mejorar. Cada categoría recibe mensualmente una bonificación por rendimiento. A los que necesitan mejorar se les aplica un plan de mejora del rendimiento. Si no mejoran, no continúan en la institución. Los buenos resultados en diversas categorías se reconocen en ceremonias de entrega de premios.

Paso 4: Apoyo a los líderes escolares

El modelo combina responsabilidad y apoyo continuo. El apoyo consiste en diversas formas:

• Capacitaciones anuales a través de la Academia de Directores.
• Una red de los directores más fuertes de la zona se integra en un grupo de WhatsApp con otros directores. Este grupo se utiliza para las comunicaciones profesionales cotidianas. Los superiores directos de los directores forman parte del grupo de WhatsApp para ofrecer orientación, soluciones y aprobaciones rápidas.
• Los directores reciben apoyo de sus superiores directos que cuentan con credenciales sólidas en educación y gestión de calidad. Ellos pueden haber sido directores o tener títulos superiores en educación.

Introducción del modelo en sistemas públicos

¿Cómo pueden los sistemas públicos introducir algunos o todos los pasos para impulsar la calidad del liderazgo escolar? La clave consiste en definir las características y capacidades de un líder escolar fuerte y, a continuación, organizar los sistemas de contratación, formación, apoyo y gestión del rendimiento en función de esas expectativas claramente definidas.

Muchos sistemas públicos muy eficaces tienen modelos similares para encontrar, formar y apoyar a los directores. Adoptar estas medidas en los países en desarrollo es posible. Países como Perú han elevado la importancia de los directores escolares como catalizadores del cambio; de ahí que se tomen en serio la contratación y el apoyo. Países como Ruanda, Sierra Leona y la República Dominicana, por citar algunos, han pasado a definir el papel, las competencias y las responsabilidades de los directores de escuela. Jamaica ha desarrollado una carrera integral de director con varias etapas. Para maximizar el impacto en el aprendizaje, cuantos más pasos se den, más impactantes pueden ser las reformas.

Otros recursos:
Management capacity and service delivery - WB website
Blog: Will a crisis force us to rethink school leadership? Insights from a South-South Exchange
Blog: Evolution of school principal training: Lessons from Latin America
Blog: The principal makes the difference
Blog: Are good school principals born or can they be made?
Book: Leverage Leadership 2.0: A Practical Guide to Building Exceptional Schools
Blog: The School Leadership Crisis ( Part 1, Part 2 )